UN DESTACABLE CLUB DE CANALLAS
Alguna vez fueron importantes en su país de origen y ahora eventualmente se reunen para "auto consolarse", se tratan según los títulos nobiliarios que poseían y pretenden estar preocupados por lo que no se preocuparon cuando tenían que hacerlo, su objetivo es hacerles pensar al resto de quienes como ellos viven lejos de sus querencias, que estan tramando algo para el feliz retorno de todos.
Es curioso, porque se manifiestas a favor del Estado de Israel, pero no han aprendido nada de los judios, cuando a los judios les tocó errar por el mundo, los grupos de poder económico apoyaron y fomentaron el trabajo de sus paisanos errantes en el resto del mundo, convirtiendose en una comunidad influyente tanto política como económicamente en paises de Europa, Hispanoamerica y especialmente en los EEUU, eso fue lo que les permitio crear el Estado de Israel, al cual no volvieron todos, pero en cuyo retorno todos contribuyeron.
Reciben en sus reuniones a quienes propiciaron su exilio, todo discurre en la más absoluta cordialidad, no hay reproches ni malas miradas, tampoco hay verguenza esa es la que más escasea, muchos de los allí presentes se enrriquecieron a expensas de servir a los tiranos y ahora pretenden ser empresarios, viven en lujosos barrios y son dueños de restaurantes y revistas, revistas que no venden un ejemplar, pero que reciben subvenciones a cambio de propaganda.
Su peor canallada es no verse más que al ombligo, ignorar al casi medio millón de exiliados que no tuvieron la fortuna de ellos o que tuvieron la suficiente dignidad para no enriquecerse a expensas de la desgracia de otros, esos que hacen de teleoperadores, ciclistas de delivery o conductores de Uber y dejaron de ser Medicos, Ingenieros y Abogados, no están invitados a las reuniones de autoconsuelo, no se les invita porque no se les tiene en cuenta... Pensandolo bien no son medio millón, son unos siete millones, regados por todas partes y en otras partes debe haber otros grupos de canallas con sus respectivos clubes; pero la verdad es que ninguno regresará, ni siquiera los miembros del Destacable Club de los Canallas