SOY UN INSOLENTE ¿Y?

SOY UN INSOLENTE ¿Y?

En el año 2009 inició mi periplo en el mundo de la opinión pública, fui invitado por el periodista Norberto Masa al programa “Grado 33” que se transmitía en Globovisión, como era de esperarse mi participación giró en torno a la condición de las Fuerzas Armadas, apenas había transcurrido poco más de un año desde que pasé a la hoy más que nunca HONROSA situación de retiro de la actividad como oficial de la Armada Venezolana, y digo que hoy más que nunca es honroso estar retirado, porque debe ser bien vergonzoso servir a un bodorrio criminal como lo es el chavismo.

Cuando comencé cuidaba mucho la entonación y las palabras que utilizaba, pero como proceso natural con el tiempo “fui soltándome” dejando aflorar mi tono simple, diáfano y podríamos decir hasta “campechano”, siempre me he preocupado por ser entendido por Doctores y Albañiles por igual. Pero en los últimos tiempos, muchas personas se me han acercado para advertirme que “se me pasó” la mano. Recibo estos comentarios con mucha humildad y me increpo a mí mismo, es muy posible que muchos de mis fracasos (que tengo como cualquier persona) obedezcan a esto. Pero cuando hago una revisión más exhaustiva, llego a la conclusión de que ¡NO! No se me ha ido la mano, salvo en mis particulares conversaciones en YouTube con mis suscriptores donde converso con ellos como si de una reunión de amigos se tratase, mis apariciones públicas preservan el buen uso del lenguaje, lo que a algunos incomoda no es el ¿cómo? Sino el ¿qué? Digo.

Digo día sí y el otro también, desde hace ya 15 años, que la tiranía que gobierna Venezuela es eso y no una Dictadura, digo que cualquier transición “seria” es de hecho una dictadura, digo que la tiranía no se irá del poder sin al uso de las armas y digo además que eso que conocemos como oposición son en realidad los cómplices necesarios de la tiranía… una vez emigrado a España también comencé a decir que el de Pedro Sánchez es un régimen conformado por idiotas y truhanes, que es totalitario, que el Partido Popular es igual a la oposición Venezolana (COMPLICE DEL REGIMEN), que VOX no logrará nada si no cambia su funcionamiento y que Alvise parece un muchacho malcriado cuyo sueño húmedo es ser entrevistado en “La sexta”. También digo que España es el mendigo de Europa, y que salir de ese engendro demoniaco llamado Unión Europea es una necesidad existencial para España… pero que no se atreven por miedo y porque se saben débiles y en manos de incompetentes ¡vamos! Los idiotas y truhanes antes mencionados. Esto me hace un insolente

Hasta este punto no habéis leído ni un “coño de la madre” ni un “mama huevos” ni siquiera un moderadito “gilipollas” no, no escucharan eso de mí, no porque no se merezcan una mentada de madre o cualquier otro improperio, merecido con creces se lo tienen, son unos verdaderos “hijos de puta” (esa expresión si se usa tanto en Venezuela como en España) no son estas palabras las que los definen, son sus propios actos y ser señalados como lo que son no es insultar, es hacer uso correcto de los adjetivos calificativos tan ricos y variados en nuestra lengua española.

Pero ellos (los hijos de puta) han creado un escudo protector, usando sus propios adjetivos calificativos (Machista, Facha, misógino, xenófobo, homófobo, etc) han arrinconado a un segmento importantísimo de la población, a quienes no pienso justificar porque si están arrinconados es porque sus complejos han sido más fuertes que sus convicciones (si es que las tienen). Llamar a las cosas por su nombre lo han señalado como “discurso de odio” cuando la realidad es que son ellos quienes además de odiar a todo el que los contradiga, odian sobre todo LA VERDAD.

Y así han transcurrido los últimos 15 años de mi vida, entre hijos de puta y acomplejados; al final ambos me llaman INSOLENTE, para unos soy un odiador y para otros un macarra, pero la verdad es que no señalan mi leguaje, señalan la verdad con la cual tengo un compromiso. Entonces ¿para qué esmerarme en moderarme? ¿para pasar a formar parte de la galería de los inútiles como Julio Borges o Borja Semper? ¡No, gracias! Ya podéis iros de largo a tomar por culo.

Como señalo en mi X (antiguo twitter) mi insolencia es producto de tu ceguera o de tu estupidez, aunque la segunda sea producto de la primera o al revés, así que lamento informarles que para unos y otros seguiré siendo un insolente, no me importa que así me llamen en cualquiera de sus formas, sea ordinario, grosero o vulgar, soy tan ordinario y vulgar como el más común de los trabajadores que no llegan a fin de mes en España o que cobra pensión de 5 dólares mensuales en Venezuela, son ellos quienes califican a los que les mienten en televisión día tras día mientras enjuagan su angustia y frustración refugiándose en la familia, son ellos quienes si tuviesen una oportunidad os llamarían hijos de la gran puta en la cara, soy tan vulgar y ordinario como ellos y por eso SOY UN INSOLENTE ¿Y?