EL ODIO A LOS MILITARES Y LO MILITAR
Es recurrente para mí el abordar el tema militar, pese a haber pasado a retiro por propia solicitud, para no convertirme en cómplice silente de lo que considero es la sistemática destrucción de la República y sus instituciones por parte de este gobierno chavista: al decir que se están destruyendo las instituciones también afirmo que se está destruyendo a las FFAANN, que en definitiva son una institución del Estado (como se les debe llamar y no FAN, ni mucho menos FANB).
Motiva esta nueva entrada en mi blog, una discusión de hace aproximadamente un mes con la Sra. Nitu Pérez Osuna; a través de la red social Twitter. Y es que la Sra. Al parecer y así lo evidencian sus constantes ataques, reduce todos los males del país a la responsabilidad de lo militar y los militares. En esa oportunidad (durante el intercambio de tuits) me comprometí a no seguir discutiendo y enviar un artículo de mi blog a la Sra. Pérez para así explicarle mi posición y el profundo error en el que incurre. Así que… aquí voy.
El odio hacia lo militar y los militares, no es nuevo. No es un invento de la llamada 5ta República; por el contrario, este periodo histórico se ha encargado de exacerbar las profundas divisiones que desde la llegada de Marcos Pérez Jiménez al poder, se fueron sembrando entre lo militar y lo civil. En aquel entonces (como ahora) el uniforme era la imagen del poder, presten atención, del poder, mas no de la represión. La represión del régimen Pérez Jimenista, recaía sobre la Seguridad Nacional, y no sobre las FFAANN. Sólo un hombre como Rómulo Betancourt, podía darle a las FFAANN la importancia que tendrían una vez derrocado el Régimen Militar.
Aquí me quiero detener, en un sentido estrictamente académico, el de Marcos Pérez Jiménez fue un gobierno militar; el de Hugo Chávez NO LO ES. Quien desee comprobarlo le sugiero remitirse a Samuel Huntington en su obra “El soldado y el Estado”, o mejor aún Amos Pearlmutter “Lo militar y lo civil en el mundo moderno”. El gobierno de Hugo Chávez es lo que Pearlmutter llamaría un “pretorianismo oligárquico” que pasó primero por ser un “pretorianismo de masas”, y que… sí; a pasos acelerados corre hacia un “pretorianismo radical” o militarismo.
Volviendo a Betancourt, si este hubiese hablado de los militares como lo hemos hecho durante los últimos 14 años (y en especial la Sra. Nitu), Marcos Pérez Jiménez hubiese gobernado hasta el día de su muerte. Betancourt sabía que una vez derrocado Pérez Jiménez, serían las mismas FFAANN las que darían soporte a la incipiente democracia venezolana, ya había vivido la experiencia del 48 con el derrocamiento de Gallegos; y el pacto de Puntofijo excluiría al partido comunista, más que todo por una necesidad de dar una imagen de distanciamiento del comunismo ante la comunidad internacional, en un mundo que se encontraba en plena guerra fría.
Así que Betancourt avizoró lo que en efecto ocurrió y mantuvo al país en guerra por más de una década, una rebelión armada de la izquierda. En medio de esa situación fueron las FFAANN las que dieron la cara por la democracia, y fueron las que pusieron los muertos por centenas.
A pesar de haber reducido la guerrilla de izquierda militarmente, el gobierno de Rafael Caldera, “pacificó” a los terroristas, delincuentes que habían mantenido asolado al país por más de 10 años, y así desmoralizó a una institución militar que lo había dado todo y que al final recibió muy poco por los sacrificios hechos. Eso mismo le está ocurriendo a las Fuerzas Armadas Colombianas en el Gobierno de Juan Manuel Santos.
Esos delincuentes por cierto, hoy son directores de medios de comunicación (no me refiero a Teodoro, aunque el también es uno), presidieron hace un par de años el Congreso de la República, y hasta presiden foros de integración hemisférica como la UNASUR. Así que vayamos identificando quienes son los culpables y dónde se originan las culpas.
El deterioro progresivo del modelo político venezolano, también deterioró a las FFAANN. Y estas al dejar de ser unas Fuerzas Armadas combatientes, se convirtieron en una Fuerzas Armadas macilentas, a la cual la clase política venezolana NO LE PRESTABA ATENCIÓN, y eran despreciados por esa clase política, por ser militares. En una conversación que sostuve con el Dr. Enrique Tejera París, (de quien nadie puede poner en duda su valía como estadista) me comentó que en una oportunidad le advirtió al presidente Pérez en su segundo mandato, que tenía muy descuidada a las FFAANN, poco después vino el 4F.
Tal era el descuido en el que cayeron las FFAANN, que Hugo Chávez logró entrar a la Academia Militar infiltrado por la izquierda, como también lo hizo el hijo de José Vicente Rangel (leer obra del ya desaparecido Alberto Garrido), logró graduarse, siendo Teniente Coronel le ayudan a aprobar el curso de estado mayor, y pese a saber que se encontraba conspirando contra el sistema le entregan el comando de un Batallón de Paracaidistas. Hoy impávidos (e impotentes) los venezolanos escuchamos al presidente en cadena nacional confirmar las afirmaciones que hago en este párrafo.
Pero continuemos, el Vicealmirante Mario Iván Carratú Molina, me comenta de los maltratos que recibía por parte de la familia presidencial siendo el Jefe de la casa militar. Yo doy fe de que el uso de barcos y helicópteros de las FFAANN, para el envío de teteros, cavas con hielo y otras especies a políticos en la Orchila y otros puntos de la geografía nacional… no ha sido práctica exclusiva de este gobierno, claro este gobierno la ha exponenciado. El primero de Enero de 1998 sufrí un accidente en la autopista regional del centro. Tras haber recibido el año en mi casa ubicada en Caracas; salí a las 3 am hacia Puerto Cabello ya que el buque de la Armada en el cual prestaba servicio zarpaba a la Orchila a las 6 am, la misión era llevar agua potable a esa Isla donde el Presidente de la República se encontraba vacacionando.
Volvamos a la conspiración y los conspiradores, dos días después del GOLPE DE ESTADO (con todas sus letras mayúsculas) el 6 de Febrero de 1992 mientras Morales Bello pedía “Muerte a los Golpistas” en el hemiciclo del Congreso, el sempiterno candidato de Copei Rafael Caldera, justificaba el Golpe, Dos años más tarde sobreseía la causa del 4F, dejando en libertad a los delincuentes, cuatro años más tarde 1998 el más conspicuo ejemplo de sedición, conspiración y golpismo era presidente de la República. Dos años más tarde, año 2000… TODOS los partidos políticos, desinflados y destruidos apoyaban la candidatura de Francisco Arias Cárdenas (otro golpista) para enfrentar a Hugo Chávez en las presidenciales del año 2000. Unas elecciones a las cuales abrió la puerta la antigua Corte Suprema de Justicia, presidida en aquel entonces por la eminente jurista Cecilia Sosa; elecciones que le dieron 2 años de vida adicional al gobierno de Hugo Chávez. HASTA AHORA QUE ALGUIEN ME DIGA ¿Dónde están los errores?
No fueron los militares los que pacificaron terroristas, no fueron los militares los que liberaron a los golpistas, no fueron los militares los que destruyeron los partidos políticos y tampoco fueron ellos los que apoyaron a Arias Cárdenas. Y no hemos mencionado el Juicio a Carlos Andrés Pérez, que fue una emboscada propiciada por la clase política que presentía la pérdida de privilegios (leer la rebelión de los náufragos, de la periodista Mirtha Rivero), cuando por fin Carlos Andrés Pérez se disponía a enderezar el rumbo de un país populista sustentado en relaciones clientelares y demagógicas (leer Pacto populista de conciliación de élites, del Profesor Juan Carlos Rey). ¿Entonces Sra. Nitu?… ¿Cómo va la cosa? ¿Dónde aparecen aquí los militares hasta ahora?
De los militares en estos 14 años se pueden decir cientos de cosas… miles de cosas. Pueden ingresar en mi Facebook PEDRO LUIS PEDROSA RODRIGUEZ, o en mi cuenta twitter @pedrosa_pedro o en este mismo blog y encontraran las más duras criticas hacia muchos militares… pero no hacia “los militares”, sino hacia “algunos militares», con nombres y apellidos.
Quienes acusan y condenan a todos los militares y lo militar, cometen un gravísimo error, además que demuestran una supina ignorancia. Esos mismos después de haberlos atacado e insultado, exigirán de ellos que combatan las guerrillas de izquierda que reaparecerán en nuestro país cuando por fin culmine el Gobierno Narco Comunista de Hugo Chávez. Seguro estoy que ninguno de los que han llamado a NUESTROS MILITARES, felones, barrigones, militarotes, cuarteleros entre otros insultos, tendrán las bolas (ups… perdón gónadas) de enfrentar a los terroristas que ya pululan en nuestro país.
Quienes acusan y condenan a nuestros militares (a todos sin distinción), han tenido la fortuna de ejercer su libre albedrío y desconocen el significado de la palabra obediencia. Obediencia que es imperante exigirle a las FFAANN una vez culmine este gobierno, y que estoy seguro que obtendrá el nuevo presidente una vez sea favorecido por la voluntad popular.
Quienes acusan y condenan a nuestros militares, los he escuchado defender a los “pobres empleados públicos… que están protegiendo su salario”. Empleados públicos que no se les exige obediencia en la Constitución, como sí a los militares (Art. 328 CRBV)… y que además están en plena facultad de ejercer su “libre albedrío”. Un militar sin embargo además de ser un empleado público, es un individuo que no posee otro empleador que no sea el Estado. Entonces ¿Quién requiere proteger su salario?
Quienes atacan y condenan a las FFAANN, olvidan que son venezolanos, que viven en este territorio, y que pasan las mismas penurias que el resto de la población. Olvidan que exponen sus vidas en el cumplimiento de su trabajo, como lo hace un policía por ejemplo, y que además son responsables de las vidas de otros hombres. Esas personas que atacan y condenan a los militares, hablan de reconciliación, pero ¿excluyen a las FFAANN de esa reconciliación?
Quienes atacan y condenan a las FFAANN, sólo albergan en lo más profundo de su corazón, lo que son incapaces de confesar… que los militares para reivindicarse, le den un golpe de Estado a Chávez Aquellos que creen que podemos eliminar a las FFAANN y citan como ejemplo a Costa Rica, solo quiero decirles dos cosas. 1.- ¿Recuerdan las peripecias de Laura Chinchilla (presidenta de Costa Rica) cuando el Ejército Nicaragüense entró en territorio Costarricense? Quien eliminó las Fuerzas Armadas en Costa Rica, seguro jamás imaginó que Daniel Ortega sería presidente de Nicaragua. 2.- Ayer fue Uribe, hoy es Santos presidente de Colombia… pero ya Petro (ex guerrillero), es el Alcalde de Bogotá, ¿Sabemos quién será el presidente de Colombia dentro de 50 años?… Creo que no, sino fuimos capaces de impedir que Chávez fuese nuestro Presidente…
Estoy seguro de que MUUUUUCHOS, oficiales están involucrados en hechos de corrupción, narcotráfico, contrabando y cualquier otra cantidad de vicios, como lo están muchos funcionarios no militares. Para todos civiles y militares aspiro paguen por sus delitos, sean juzgados y se instaure el orden en nuestro país (y hago énfasis… se instaure el orden, no digo retorne, ya que estoy convencido que nunca los hubo… por lo menos no después de Leoni).
Para todos civiles y militares aspiro nos reconciliemos, seamos venezolanos, los civiles con su preferencia política y los militares siendo sólo eso militares, al servicio de todos y no de unos pocos. A los que han atacado la institución, los invito a reflexionar, y a darse cuenta de que sin FFAANN NO HABRÁ GOBERNABILIDAD en un gobierno post Chávez.
POR CIERTO… AÚN ME QUEDAN COSAS POR DECIR